La profesora e investigadora Aída Toscani convocó a estudiantes de distintas carreras para que participen de las tareas de recuperación arqueológica del Reducto Rural Fortificado, ubicado en el predio del INTA Pergamino, que se hará del 8 al 11 de marzo próximo.
“Es una experiencia muy rica en el campo de la investigación de las ciencias sociales”, dijo Toscani.
Los trabajos de campo serán de recuperación del espacio original de las áreas del foso y el aljibe del reducto, así como la ubicación y delimitación del área destinada a las actividades de cocina.
El Reducto Fortificado es una casa rural fortificada que perteneció a la estancia de Pío Cueto y fue construida alrededor de 1838, plena época rosista. Con este trabajo lo que se intenta es, a través de los objetos que se obtengan en las excavaciones, reconstruir la vida cotidiana en una estancia durante el período histórico mencionado.
La convocatoria está abierta a estudiantes y docentes de las distintas carreras desde ese marco histórico. “Esta puede ser una experiencia muy rica para los estudiantes de las carreras de Economía para indagar en el desarrollo productivo de la época. También puede ser de utilidad para la Escuela de Ciencias Agrarias, Naturales y Ambientales para aproximarse al panorama de cómo y qué se producía en una estancia a mediados del siglo XIX; o a quienes están cursando la Licenciatura en Ciencias Sociales”, destacó la investigadora de la UNNOBA, que recordó que los arqueólogos que trabajarán en la experiencia serán Laura Lisboa y Lucas Martínez.
Casa Rural Fortificada
La particular arquitectura de la Casa Rural Fortificada responde a las necesidades de defensa frente al ataque permanente que sufrían las estancias que formaban parte de la Frontera, como era Pergamino.
Las situaciones de zozobra por ataques de malones y de los ejércitos que participaban de las guerras civiles fueron frecuentes, hasta bien entrada la década del 70 del Siglo XIX.
En 1838, Don Juan Pío Cueto, compra al Estado provincial las tierras que constituyeron la estancia San Juan.
Hasta la fecha mencionada las explotaba bajo el sistema de Enfiteusis. La Casa Fortificada se construyó como vivienda familiar y lugar de defensa en caso de ataque. En ella vivió Pío Cueto con su mujer Loreto Gómez y los nueve hijos que tuvo la pareja.
A través de las excavaciones se busca encontrar objetos que formaron parte del mundo material de un espacio productivo como era la estancia en la primera mitad del siglo XIX y que se diferencia de la estancia de los finales de ese siglo.
También es posible recontruir la cotidianeidad de una familia que responde al modelo de familia criolla denominada extensa, pues en ella convivían los padres con los hijos casados, otros parientes, agregados y los domésticos.
Programa de actividades
Las tareas de recuperación estarán estructuradas de la siguiente manera:
El 8 de marzo por la mañana se hará relevamiento de fotos y bibliografía y por la tarde comenzarán las tareas de campo.
El 9 por la mañana y por la tarde se harán tareas de campo foso.
El 10 se harán en los dos turnos tareas de campo aljibe.
El 11 por la mañana se harán tareas de ubicación del área de cocina y cierre de tareas de campo, mientras que por la tarde está previsto charla, exposición y avances.
Los interesados en participar de estas actividades podrán contactarse con la investigadora Aída Toscani a través de su mail: atoscani@unnoba.edu.ar
Juan Pio Cueto es mi tatarabuelo y segun informacion que tengo su hijo mayor, Jacinto Cueto, era hijo de Dionisia Acevedo.Suponiendo que haya enviudado de esta, Juan Pio se presenta a la parroquia de Pergamino y reconoce 8 hijos naturales, a los que alimenta, viste y da cobijo, segun consta en una fotocopia que poseo de ese documento.Jacinto Cueto, mi bisabuelo,nacido en Pergamino, fue militar y su primer hecho de armas fue en la vuelta de Obligado, en 1845, del cual poseo un manuscrito con su historia militar, presentado al Estado Mayor del Ejercito para reconocimiento de servicios y otros documentos originales de epoca. Seria interesante contactarnos.