
En un emotivo acto y en el marco del “Día Nacional por la Memoria, la Verdad y la Justicia”, la UNNOBA resolvió denominar un espacio del edificio que se encuentra en Rivadavia y Newbery (Junín) con el nombre de Azucena Caivano de Prieto, por su lucha por los derechos humanos y en homenaje a todas las Madres de Plaza de Mayo.
La propuesta la elevó la Cátedra Libre de Derechos Humanos de la Universidad, cuyo director Oscar Farías dijo que el objetivo es “rescatar y reivindicar las luchas de estas mujeres, sus sacrificios en los años de dictadura, sufriendo todo tipo de persecuciones y hostigamientos”.
“En democracia sostuvieron la memoria y acompañaron los procesos de los Juicios por la Verdad realizados en Junín hasta sus últimos días; sus luchas y trayectorias son un ejemplo para las nuevas generaciones que valoran la democracia y la Constitución de este país”, añadió Oscar Farías.
El pedido de la Cátedra Libre de Derechos Humanos fue aprobado por el Consejo Superior de la UNNOBA, integrado por representantes de todos los claustros.
Walter Prieto, hijo de Azucena y de Manuel Prieto, es uno de los desaparecidos de la ciudad de Junín durante la última dictadura militar.
En el acto estuvieron presentes las hijas de “Coca” Prieto, Olga y Gladys, quienes agradecieron el reconocimiento en un “lugar emblemático”.
“Fue una lucha colectiva. Primero fueron a las marchas en Buenos Aires, después organizaron las Madres de Plaza de Mayo de Junín. Nuestra madre, por sus características personales, fue quien lideró ese primer grupo”, recordó Olga.
Su hermana Gladys destacó que el trabajo de las “madres” así como el de las Abuelas de Plaza de Mayo estuvo siempre acompañado por los padres, los familiares, los ciudadanos y ciudadanas sensibles a la lucha por los Derechos Humanos. “Ninguna actividad hubiera sido posible de manera individual. La construcción de la memoria es colectiva”, afirmó.
“Ellas reivindicaron la lucha de sus hijas y sus hijos y los que dieron la vida por una Argentina mejor. En este contexto actual de negacionismo, construir la memoria en una casa de estudios superiores es absolutamente importante. Es un lugar, un momento y un espacio absolutamente importante”, añadió Gladys Prieto.
A continuación Farías hizo un recorrido de todo el trabajo del área de Derechos Humanos de la Municipalidad de Junín desde su creación hasta la actualidad, destacando el momento de los Juicios por la Verdad.
Agradeció a la UNNOBA por acompañar la iniciativa del homenaje y a todos los que acompañaron, desde diferentes partidos políticos, hasta organizaciones sociales, educativas, sindicales y culturales. “En especial a los testigos sobrevivientes, que dieron testimonio en los Juicios por la Verdad que se desarrollaron en el Salón de la Democracia”, resaltó.
“Acá se reúne todo el estudiantado del edificio (Rivadavia y Newbery), tiene una incidencia que esté en este lugar la placa. Hablar de “Coca” es hablar de todas las madres. Homenajearlas es rescatar la vida de cada una de ellas”, agregó.
“Ella siempre decía: nuestros hijos no se fueron, nosotros somos sus ojos, sus voces y sus corazones”, dijo en el cierre de su discurso Farías.
Finalmente tomó la palabra el director de la Escuela de Ciencias Económicas y Jurídicas, Pablo Petraglia, quien transmitió el saludo del rector Guillermo Tamarit y aclaró que no estuvo presente porque por razones de agenda se encuentra fuera de Junín.
“La Universidad siempre ha dado testimonio de que la lucha por la memoria, la verdad y la justicia es parte de su ADN constitutivo. El rector organizador Luis Lima fue fundador de la Comisión Provincial por la Memoria”, citó como ejemplo.
Después añadió que la UNNOBA nombró profesor honorario a Adolfo Pérez Esquivel y a Eugenio Zaffaroni y que el año pasado recibió a Martín Farrell, a quien el Consejo Superior homenajeó porque junto con Carlos Nino fueron ideólogos de lo que fue el juicio a las juntas militares en los 80.
“No se hubiesen hecho si Farrell no hubiera fundamentado cómo había que llevar a los genocidas a la cárcel”, afirmó Petraglia.
También recordó que la UNNOBA nombró visitante ilustre a Estela de Carlotto, a Nora Cortiñas y a Ricardo Gil Lavedra.
Petragalia recordó que los Juicios por la Verdad en Junín se desarrollaron en el Salón de la Democracia (sede Rectorado): “Tenemos que hacernos cargo de la memoria, preservar los lugares de la memoria, tenemos que acompañar a nuestros estudiantes a que participen en la construcción de esa memoria que algunos con el desmantelamiento de las políticas públicas hoy lo ven como una gracia”.
“Desde la universidad, como contracultura hoy decimos que no, por eso este homenaje en la persona de “Coca” y de todas las madres, padres, hijos, amigos, novios, parejas que sufrieron. La UNNOBA no es indiferente, por eso estamos acá, por eso está la política, los sindicatos, las ONG’s, los amigos de la vida, para decir no olvidamos, queremos memoria, verdad y justicia”, añadió en el final de su discurso el director de la Escuela de Ciencias Económicas y Jurídicas de la UNNOBA.














