La Universidad firmó un convenio con el INTA para la conformación de la Unidad Integrada, una iniciativa que posibilitará la creación de un complejo científico tecnológico para fortalecer la producción agropecuaria y contribuir al desarrollo regional.
En un acto realizado en la sede Pergamino de la Universidad, el rector Guillermo Tamarit expresó que el acuerdo era un hecho muy especial para la UNNOBA. «Estamos poniendo en marcha un complejo de desarrollo científico, de formación de recursos humanos y de transferencia
de tecnología de los más importantes del país y de Latinoamérica», señaló.
Tamarit dijo que la Unidad Integrada es un proyecto compartido y sentido por la región. «Este esfuerzo tiene como principal objetivo mejorar las condiciones sociales y económicas de nuestra sociedad», remarcó.
El rector afirmó que la UNNOBA apunta en poco tiempo a concretar el desarrollo del edificio de la Escuela de Ciencias Agrarias, Naturales y Ambientales en predios del INTA. «De esta manera encontraremos en un par de kilómetros una concentración de actividades académicas, científicas y de transferencia de tecnología de la más alta calidad que pueda ofrecer
este país», anticipó.
«A la tradición, experiencia y excelente labor del INTA en la región, agregamos el vigoroso impulso de la universidad pública en Argentina. No tengo dudas de que es esta una sociedad que dará importantes frutos a la región y al país», subrayó.
Por fuera del mensaje institucional, el rector agradeció la colaboración del ingeniero Pedro Gómez y del ingeniero Luis Lima y destacó la tarea desarrollada por Silvina Sansarricq, prosecretaria de Investigación, Desarrollo y Transferencia, en la vinculación con el INTA.
En el mismo sentido, destacó el perfil de Alfredo Calzolari, quien fue
nombrado en el mismo acto como director de la Escuela de Ciencias Agrarias, Naturales y Ambientales.
En la ceremonia estuvo presente el titular de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU), Alberto Dibbern, quien se refirió a la creación de la Unidad Integrada como el logro de un objetivo entre instituciones que deben transitar caminos comunes.
«Siempre entendí que estas instituciones, la Universidad y el INTA, no pueden tener caminos paralelos, tienen que tener una zona de cruzamiento e intercambio que sean útiles y desarrollen inteligencia, generen conocimiento, brinden servicios y transfieran tecnología, que sirvan al desarrollo del país y de un pueblo», planteó.
Dibbern resaltó la determinación del INTA de ceder los predios para la construcción de la Escuela de Ciencias Agrarias en la Estación Experimental Pergamino como «una decisión que demuestra que esta iniciativa va más allá de los papeles».
Por último, y como titular de la SPU, Dibbern aprovechó el marco de la ceremonia para ratificar su compromiso personal de hacer que esta iniciativa «sea una realidad y que pueda tener impulso en el marco del Programa Nacional de Infraestructura Universitaria».
Una alianza
Por su parte, el ingeniero agrónomo Rolando Hernández, director del Centro Regional Buenos Aires Norte del INTA, opinó que la iniciativa «tiene como objetivo promover la investigación, el desarrollo tecnológico, la transferencia y extensión, la vinculación tecnológica y la cooperación institucional».
«Sin duda que el marco institucional es indispensable, pero creo que tanto o más importante es la construcción que hagamos de aquí en adelante todos los integrantes de ambas instituciones. Las primeras acciones estarán orientadas a la investigación, la extensión y la formación de postgrado», señaló.
También estuvo en el acto el intendente de Pergamino, Héctor Gutiérrez, quien auguró que esta iniciativa iba a signar el desempeño de la UNNOBA y el INTA durante las próximas décadas, al tiempo que marcó su satisfacción por la decisión de las autoridades de la Universidad de instalar en Pergamino la sede de la Escuela de Ciencias Agrarias, Naturales y Ambientales.